La primavera es la estación más imprevisible que conozco. Esta tarde cayó un chaparrón sobre la Plaza Mayor de Segovia. Era una lluvia que nadie esperaba. Si hace unos días Segovia padecía temperaturas más propias del verano, hoy la primavera es capaz de confundirse con el invierno ¡Qué le vamos a hacer! En el fondo, me gusta que mayo sea así: que llueva hoy, que mañana haga sol; quiero que cada día de mayo me sorprenda cuando despierte. Si las primaveras no son locas no son primaveras.

9 mayo, 2017